Chuletas de cordero con bechamel.

Prepara estas irresistibles chuletas de cordero con bechamel, un plato crujiente y lleno de sabor que en casa siempre nos encanta disfrutar. ¡Un verdadero festín!

Chuletas de cordero con bechamel

Ingredientes:

  • Chuletas de cordero: 12 unidades
  • Aceite de oliva: Cantidad suficiente para freír
  • Sal y pimienta: Al gusto
  • Pan rallado: 200 gramos
  • Harina para rebozar
  • Huevo batido: 2 unidades
1. Para la bechamel:
  • Mantequilla: 50 gramos
  • Harina de trigo: 50 gramos
  • Leche: 500 ml
  • Sal, pimienta y nuez moscada: Al gusto

Elaboración:

1. Preparar las chuletas:
  • Sazonar las chuletas de cordero con sal y pimienta al gusto.
  • Para cocinarlas hay dos opciones: Yo las pongo sobre una plancha de horno con papel debajo y las hago a 180º durante unos minutos. La otra posibilidad es cocinarlas a la plancha o en una sartén con un poco de aceite de oliva sin que lleguen a estar doradas (ya que luego se tienen que freír de nuevo tras el rebozado). Retirar y reservar esperando que queden totalmente frías.
2. Preparar la bechamel:
  • En una sartén, derretir la mantequilla a fuego medio.
  • Añadir la harina y cocinar por unos minutos, removiendo constantemente para que no se formen grumos.
  • Poco a poco, añadir la leche sin dejar de remover hasta obtener una salsa homogénea y sin grumos.
  • Sazonar con sal, pimienta y una pizca de nuez moscada. Cocinar hasta que espese ligeramente.
3. Rebozar las chuletas:
  • Deja enfriar para que la bechamel se adhiera bien a la carne.
  • Luego, sumerge cada chuleta en la bechamel caliente, asegurándote de que quede bien cubierta.
  • Pasa las chuletas por harina, luego por huevo batido y finalmente por pan rallado.
  • Deja enfriar completamente, incluso en el frigorífico. En esta situación se pueden también congelar y pueden durar varios meses.
4. Freír:
  • Calentar suficiente aceite en una sartén y freír las chuletas hasta que estén doradas y crujientes.
  • Retirar y escurrir en papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
5. Servir:
  • Servir las chuletas calientes, acompañadas de una guarnición a tu elección, como ensalada, papas fritas o vegetales.
Chuletas de cordero con bechamel
Consejos:
  • Bechamel sin grumos:
    • Para evitar grumos en la bechamel, asegúrate de añadir la leche poco a poco y a temperatura ambiente o tibia, mientras remueves constantemente. Si aun así aparecen grumos, puedes pasar la bechamel por un colador o utilizar una batidora para alisar la salsa.
  • Tiempo de enfriamiento:
    • Deja que las chuletas cubiertas con bechamel enfríen completamente en la nevera por unos antes de empanarlas. Esto ayudará a que la bechamel se adhiera mejor y no se deshaga durante el proceso de rebozado.
  • Aceite caliente y cantidad adecuada:
    • Asegúrate de que el aceite esté bien caliente (alrededor de 175-180°C) antes de freír las chuletas. Si el aceite no está lo suficientemente caliente, las chuletas absorberán más aceite y quedarán grasosas en lugar de crujientes.
    • Utiliza suficiente aceite para que las chuletas estén sumergidas al freír. Esto permite que se cocinen de manera uniforme.
  • Escurrir bien:
    • Después de freír, coloca las chuletas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite. Esto ayudará a mantenerlas crujientes y ligeras.

¡Y ya está! Tus chuletas de cordero con bechamel estarán deliciosas y listas para impresionar. ¡Buen provecho!

¿Qué te ha parecido esta receta?

¡Haz clic en una estrella para puntuarla!

Puntuación media: 5 / 2 votos

Hasta ahora, ¡no hay votos!. Sé el primero en puntuar este contenido.

Ya que has encontrado útil esta receta ...

¡Deja un comentario abajo y sígueme en redes sociales!

¡Siento que esta receta no te haya sido útil!

Dime, ¿cómo puedo mejorarla?

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio